domingo, 11 de noviembre de 2012

Como todos ellos


Como el solitario enterrador de Huayna Picchu, en el templo de la luna,
como el orfebre maestro de las grandes salas de Petra,
como el caminante que se pierde de camino a Roma,
o como el primer niño que miró hacia las estrellas e intento coger alguna

Como el capitán pirata que teme más a una mujer que al leviatán,
como Mehmed a las puertas de Estambul,
como el primer marino que no vio el mar, sino el azul,
o como la primera dama traicionada en cihuatán.

Como Alejandro, cuando miraba a Hefestión,
como el poeta que ve bailar al tiempo con el viento,
como la gitana que teme al pañuelo en su casamiento,
o como el verso mágico de Odín en su narración

Como todos ellos te veo
y te contemplo,
con la carita pintada entera de rojo
y fue entonces, sentados junto a Orfeo,
que me miraste a los ojos,
con tus labios húmedos de deseo...
y me dijiste:
"ven, ven, ven, ven"
y yo, ya estaba yendo.


Manuel Eduardo Dato Torres,
11/11/2012

No hay comentarios: